Tengo tanas cosas para decir...que a veces los sentimientos se agolpan en el pecho y de tanto que tengo, todo termina en nada. A veces, me revelo, otras me auntoconsuelo, pero de una u otra forma siento que nada me es suficiente.
Lo poco me resulta inalcanzable y demasiado me es incontroloble. Y es ahí, justo en ese momoento donde escapo de mi abismo y salto de mis propias cornisas.
Busco salidas, puertas cerradas, historias inconclusas que sólo me atrapan.
A veces, me dejo llevar, otras veces me contengo, pero siempre, siempre, termino adentro del mismo hueco.
Me refujio en letras que son producto de la detonación que existe en mis adentros. Se me cortan las alas, se me terminan los tiempos. Y lloro, lloro para no explotar, lloro porque aprendo a no hacerme mal y a controlar la situación, a controlarme.
Me asfixio y vuelvo a respirar, me oxido pero vuelvo a resusitar. 2 meses de alegría vs. la pena que dura una eternidad.
Evelyn.
